Recordad que el lema del viaje es "no limits" pues aquí los hubo, aunque ahora con perspectiva creo que fue lo mejor que nos podía pasar.
En principio lo atractivo de esta parada es porque es punto de salida de las excursiones a FROSER island, la isla de arena más grande el mundo, tal es así que se hacen con 4x4, porque un coche normal no podría avanzar, se quedaría atascado, bueno pues aú así, yo quería ir, con mi silla de ruedas ,me daba igual, total pensaba quedarme en el coche, disfrutando de las vistas mientras el grupo disfrutaba de las dunas, el lago Mackenize y demás paseos por la playa, pero al contactar con dos de las agencias que lo organizaban me pusieron un montón de pegas, así que llegamos a Hever BAY, sin la excursión contratada y aún así hice un último intento de pillarla en el hostel, pero ya era tarde, estaba todo ocupado, ahí tuve mi primer momento de enfado, y justo entonces apareció el primer español que nos cruzábamos en el viaje, menos de ahí, nos ponemos a charlar y me dice que le ha decepcionado un poco, que él era del norte y esos paisajes más menos ya los conocía, en fin poco más podía hacer, así que nos dimos un paseo x el pueblo para cenar y darnos cuenta de la cero vida que había ahí, solo se oía gente en los distintos hostels.
Pues bien nos levantamos sin saber muy bien qué hacer, y además el día estaba muy nublado y amenazaba tormenta tropical, qué la hubo, toma karma, y paseando llegamos a la súper playa, DESIERTA, ni un alma, pero una gozada, así que ahí plantamos el pareo y a nadar, una maravilla, os dejo fotos.
Poco más, esa tarde la pasamos en el hostel viendo llover y descansando, nos esperaban 12 horas de bus nocturno hasta la próxima parada.
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